Por: Gerardo Enrique Garibay Camarena
08-septiembre-2010
"Facts are stubborn things"
John Adams
Desde el 23 y hasta el 27 de agosto pasado se llevó a cabo la Conferencia mundial de la Juventud, un evento internacional organizado por el gobierno federal en colaboración con diversas agencias de la Organización de las Naciones Unidas, supuestamente como un espacio de discusión y reflexión sobre el papel de los jóvenes en la consecución del desarrollo, con especial énfasis en los Objetivos de Desarrollo del Milenio.
Sin embargo, la realidad es que, desde su propia planeación, la conferencia buscó manipular la voz de los jóvenes y cerrarles los espacios de participación, al grado de que solo 2 jóvenes por país tuvieron voz en el foro de las ONG'S, mientras que las decisiones reales se tomaban en otro foro, el de gobiernos, donde los jóvenes no pudieron participar.
Mientras tanto, en el foro interactivo, los numerosos stands de grupos pro-aborto y pro-gay, ofrecían, entre otras cosas, recetas caseras para abortar, cantidades industriales de propaganda, manifiestos de izquierda y, literalmente, miles de condones.
Con este panorama, todo indicaba que la ONU, el lobby de la cultura de la muerte y sus cómplices en el gobierno federal lograrían engañar a la sociedad y falsificar la opinión de la juventud mundial, pero los jóvenes no se dejaron manipular y, recurriendo a la creatividad, hicieron oír su voz, no solo hablando fuerte sino, sobre todo, diciéndolo bien.
Primero el domingo 22, a través de una multitudinaria marcha internacional por la vida, que paralizó a la ciudad de León y más tarde con el foro Dilo Bien! organizado por la OSC "Jóvenes Competitivos" a escasos metros del lugar donde se llevaba a cabo la conferencia "oficial".
Así, gracias al valor, el civismo y la participación de miles de hombres y mujeres provenientes de todo México y el mundo, quedo muy claro, para todo el que quisiera escuchar, que la agenda de la ONU y sus esbirros no representa la verdadera voz de los jóvenes.
Al final del día, el fracaso de la Conferencia Mundial de la Juventud, representa una victoria contundente para la juventud en general, por la madurez y la decisión con que los participantes de Dilo Bien! Se enfrentaron al autoritarismo de Naciones Unidas y lograron hacerla temblar en su propio terreno.
John Adams, segundo presidente de los Estados Unidos de América, dijo alguna vez que los hechos son obstinados y, por tanto, no pueden ser manipulados por deseos, inclinaciones o agendas, sin importar que tan poderosos sean sus promotores.
Así lo hemos entendido los jóvenes y sabemos que, a pesar de lo que diga la prensa y los grupos de presión, la vida comienza en la concepción y el matrimonio solo puede darse entre hombre y mujer.
Estos son hechos y los hechos son obstinados. Nosotros también.
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